09 abril 2012

a* (V)

     Había un chico, y un piano, la música empezó a sonar acompañada de su voz y entonces fue como si estuvieses allí, conmigo, abrazándome, soñando por mi.
     Se que te hubiese gustado, y cuán feliz hubiese sido humilde servidora disfrutando tu sonrisa.
     En otra ocasión fue un arpa acariciada por un hombre experimentado y entonces te quise y toda mi cabeza fuiste tú. Como lo eres desde hace tiempo, como lo has sido estos días que llevo sin verte, como estoy segura que seguirás siendo mucho tiempo.

3 comentarios:

  1. El poder evocador de la música. Y el amor, siempre.

    ResponderEliminar
  2. Cuando uno está enamorado, se siente siempre acompañado por la persona amada, incluso sin estar presente...

    ResponderEliminar
  3. Es precioso. Y es que la música a veces va mucho más allá de ser simples sonidos...

    Un beso!

    ResponderEliminar